Encuentran la ubicación de traficantes de droga de la Dark Web gracias a los metadatos de sus fotos

Dos estudiantes de la Universidad de Harvard han analizado fotografías procedentes de la Dark Web y han localizado 229 sitios alrededor del mundo

Paul Lisker y Michael Rose, dos estudiantes de la Universidad de Harvard, han descubierto la ubicación de traficantes de droga que venden su producto a través de la Dark Web gracias a los metadatos de las fotos que publicaron.

Se trata de un estudio con el que se quería analizar la prevalencia de los descuidos de la privacidad en la Dark Web y cuyas conclusiones han sido publicadas en este artículo.

Según explican los propios autores, el procedimiento que siguieron fue el siguiente: en primer lugar se descargaron The Black Market Archives, un archivo que se puede adquirir libremente (cuidadado, tiene un tamaño de alrededor de 1.5TB) y contiene ficheros procedentes de la Dark Web. Posteriormente, analizaron los datos EXIF de cada una de las imágenes contenidas en webs de venta de estupefacientes.

Los datos EXIF o metadatos son la información asociada a cada fotografía, entre la que se pueden encontrar datos como la fecha y el lugar de captura, el modelo del dispositivo empleado, el tamaño de la imagen… De todos estos datos, el que les interesaba a Lisker y Rose era el de ubicicación; las coordenadas GPS del lugar donde se había tomado la instantánea.

De este modo, se detectaron 229 lugares alrededor del mundo desde los que se habían realizado fotografías de estupefacientes que luego habían sido publicadas en la Dark Web. Estos sitios están señalados en el siguiente mapa interactivo.

¿Cómo evitar que nos localicen a través de los metadatos de nuestras fotos?

Cuando un usuario sube una foto a Internet, no siempre es consciente de que está proporcionando más información que la que contiene esa instantánea. Puede estar dando datos de la fecha y el lugar en el que tomó esa foto, del dispositivo que empleó… Información que, en definitiva, puede comprometer su privacidad y ser utilizada por usuarios malintencionados.

Para no facilitar más datos de los que el propio usuario quiera publicar se pueden tomar diversas medidas de seguridad. En primer lugar, se puede desactivar la etiqueta GPS de la cámara del teléfono móvil, de modo que nadie podrá saber desde dónde se ha realizado esa foto. En los dispositivos Android este ajuste se realiza siguiendo estos pasos Ajustes > Etiqueta GPS > Desactivada, mientras que los usuarios de iOS deben hacer lo siguiente: Privacidad > Localización > desactiva el interruptor de la Cámara.

Por otro lado, existen aplicaciones que borran todos los metadatos de una foto, y que son convenientes utilizar antes de publicar estos archivos en redes sociales o cualquier sitio web. PhotoShield EXIF Manager, para Android, o Photo EXIF Eraser, para iOS, son solo dos de las múltiples aplicaciones de este tipo que existen en el mercado.